Érase una vez, una Princesa Valiente…
Me llamo Bella Johnson. Sí, Bella con elle, como la del famoso cuento, nada de Bela que en esta historia no hay vampiros; aunque sí, algunos que bien podrían haber salido de una novela de terror. Tengo veintinueve años, vivo en Madrid y trabajo como secretaria para una importante empresa de publicidad de la capital. Soy impulsiva, me gusta creer que divertida, y no me dejo dominar fácilmente. Quizá esto se deba a que diez años atrás sufrí un suceso (diría que traumático) que cambió mi vida: me alejé de mi familia, dejé de ser la que era y desde entonces no he vuelto a relacionarme con los hombres con normalidad.
Y hasta aquí puedo leer, porque contar cómo conocí a Daniel Baumann, ese hombre inaccesible, mejor conocido como la Bestia, un día bastante bochornoso, dicho sea de paso, y de cómo todo empezó a cambiar desde entonces, sería desvelar demasiado. Lo que sí puedo asegurar es que lo que aquí se narra tiene que ver con el amor, la esperanza, la confianza y puede que, con lo más importante de todo, con cómo reconstruirse a uno mismo. Ya sabemos que ese es el proceso más difícil de todos.